El titular de la Fundación Apostemos a la Vida, Leandro Martínez, expreso su preocupación por los incesantes accidentes de tránsito en el ámbito local, por la imprudencia y falta de respeto de las normas en vigencia, habiendo un total y absoluto desconocimiento por quienes conducen a diario en nuestra ciudad, a pesar que antes de obtener la licencia de conducir, deben hacer un curso vial que lamentablemente poco sirve porque salen a manejar como si estuvieran en una pista de autitos chocadores que todo vale sin importarles la vida de terceros.
La nueva modalidad de ordenamiento en el tránsito debería contener una propuesta modelo de contenidos que pueda servir de prevención e información hacia los automovilistas en general con la firme convicción que los inspectores de tránsito, no solamente que realicen INFRACCIONES, sino tener una visión de prevenir en los conductores advirtiéndoles que conduzcan responsablemente por determinadas maniobras que puedan afectar a terceros. Las acciones priorizadas, deberían ser de CONCIENTIZACION y no rápidamente SANCIONATORIAS, así de esta manera, los conductores colaboraran más en su forma de conducir y la colaboración en el manejo responsable será más efectivo.
La ciudad debe ser un espacio de relación para las personas, donde el contacto, la convivencia y la comunicación constituyan la esencia de la vida colectiva. Para cualquier civilización, ciudades y pueblos han constituido desde siempre los motores de su desarrollo social y económico, siendo por ello más eficientes y eficaces.
El problema de la inseguridad vial en los conductores en sus manejos muchas veces imprudentes y hasta negligentes se corrige con PREVENCION. EDUCACION E INFORMACION VIAL, en lo cual los inspectores deberían salir a la calle en sectores que se tornan muy peligrosos por quienes violan las normas de tránsito y poner más ENFASIS Y ATENCIÓN en los semáforos para que no pasen rojo, como lo hacen en grande parte de la ciudad. Así como también en los boulevares que no pudiendo doblar a la izquierda habiendo semáforos no les importa y realizan esa maniobra peligrosa lo mismo. Un mayor control y PREVENCIÓN, para lograr una eficaz reducción en accidentes cotidianos que en nuestra capital cada día son más.
La formación y la información sobre seguridad vial, es actuar con los ciudadanos para concientizarlos sobre los valores viales para evitar un manejo imprudente y hacerlo responsablemente como hábito de vida y sobre todo ADVERTIRLOS de NO conducir cuando consuman bebidas alcohólicas y/o alguna sustancia tóxica poniendo en riesgo a personas inocentes y basta de lamentar víctimas en nuestra ciudad por quienes conducen de manera temeraria.