LA COPA AMÉRICA EN EL MUSEO TELLO


Un día más de Copa América en el Museo Tello

Desde el pasado 4 de julio el Museo Tello de Viedma se convirtió en el epicentro de la alegría y la emoción para niños, adolescentes y adultos, con un marcado éxito que obligó a extender la actividad hasta el miércoles 24.

La muestra de fotografías de las Copas América ganadas por la Selección Argentina, no solo permitió revivir los gloriosos momentos del fútbol nacional, sino que también facilitó el intercambio de figuritas para el álbum del torneo continental. Familias enteras se acercaron para admirar las imágenes y participar en actividades lúdicas que fomentaron el encuentro intergeneracional y el disfrute en comunidad.

La exposición no solo deslumbró con la presencia de las fotografías, sino que el espacio rememoró la pelota de trapo a la que había que introducir en el arco a través de un aro, el armado de rompecabezas con las imágenes de los ídolos de la celeste y blanca, y el tejo donde “el gol se hace con la mano”. Pero lo más atrayente fue el intercambio de figuritas, donde los chicos llevaron a los grandes de compañía y estos se encontraron con el niño que tienen dentro y compartieron su pasión por completar el álbum.

“Es impresionante ver la cara de los chicos cuando llenan sus álbumes o consiguen la figurita más deseada, y hoy -por el viernes 19 a la tarde- ninguno se quiso perder el sorteo de las camisetas”, comentó Leo, miembro del staff del museo, de la Secretaría de Cultura de Río Negro. Por otra parte se ve emocionante como los adultos se coparon en jugar con la pelota de trapo mientras sus hijos intercambian sus “figus” y los que esperan que se haga un hueco, juegan con los rompecabezas y el tejo. Esta combinación de actividades logró que cada visitante encontrara su espacio de diversión y esparcimiento.

“El éxito es total y el balance muy positivo, ya que se logró uno de los objetivos principales: la llegada masiva del público al Museo Tello”. “Por momentos es tanta la cantidad de gente que llega y no encuentra lugar para intercambiar las figus, que van y visitan las otras salas, la de tecnología y la de los gobernadores”, destacó Leo. Esto no solo permitió que más personas conocieran y apreciaran las diferentes áreas del museo, sino que también fomentó un ambiente de cultura y aprendizaje para todos los asistentes.

Entre los momentos más memorables, se destaca la presencia de mayores que acompañaban a los niños, cómo Edit, una abuela que recordaba con nostalgia cómo en su infancia trataban de conseguir las figuritas junto a su hermano. “Hoy revivo aquellos días canjeando las figuritas para mis nietos”, compartió emocionada. Este tipo de relatos enriquecieron la jornada, tejiendo un puente entre generaciones y mostrando cómo el fútbol y las tradiciones familiares pueden unir a las personas en un mismo espacio de alegría y convivencia.