Para frenar el preocupante aumento de la inseguridad y el narcotráfico en la provincia, el Congreso de la Unidad Popular propuso reformar la Justicia y la Policía. El partido considera que hay que llevar a cabo una mejora de las condiciones laborales en las fuerzas de seguridad que contemple un aumento del 100% del salario actual.
“Esto debe ser necesariamente respaldado por una profunda formación en valores democráticos para que se pongan del lado del pueblo y no lo estigmaticen. Menos horas de prácticas de tiro y más de estudio de las constituciones nacional y provincial”, apuntó el Presidente del partido, Rodolfo Aguiar.
“Es cierto que nuestra Policía tiene salarios de pobreza, las comisarías están destruidas, no tienen equipamientos, y muchos trabajan mal dormidos porque tienen que hacer adicionales permanentemente para garantizar un ingreso digno en sus hogares. Pero también es cierto que esa misma Policía tiene una lamentable historia de abusos en la provincia”, detalló el referente y continuó: “Recordemos los hechos de represión, como los casos de Diego Bonefoi, Sergio Cárdenas, Nicolás Carrasco, Daniel Solano, entre otros. También los delitos cometidos hacia adentro de la propia fuerza como lo sucedido con Lucas Muñoz o Gabriel Mandagaray”.
Este último caso, en el que el oficial ingresantes falleció en abril de 2021, tuvo especial repercusión en la provincia porque desnudó una serie de repudiables prácticas que se daban en los entrenamientos de las fuerzas de seguridad, como abuso de autoridad de forma denigrante, ejercicios físicos peligrosos, mala alimentación intencional, entre otras.
En casos como estos queda demostrado que el “baile” sigue siendo el principal método de formación en las fuerzas de seguridad. Es decir, los abusos de autoridad con ejercicios físicos extremos y humillantes que tienen la supuesta intención de fortalecer el carácter, pero que no hacen otra cosa que violentar los derechos del suboficial ingresante. Lejos de lograr formar a un agente de seguridad íntegro, en muchos casos degenera a uno en forma violenta, represiva y autoritaria.
Es por eso que la UP marcó la urgente necesidad de una reforma en la Policía rionegrina que los instruya para estar al servicio de la sociedad garantizando el pleno ejercicio de los derechos de la ciudadanía. “Son actores fundamentales para alcanzar el orden cívico siempre y cuando no sean corrompidos”, concluyó.
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