A partir de la instalación de radares fijos con cámaras en los ingresos a las localidades de Médanos, Mayor Buratovich y Pedro Luro, que comenzó a realizarse días atrás y finalizará durante la semana próxima, en febrero comenzará a multarse a los conductores que circulen por estos lugares y no respeten las velocidades máximas permitidas.
La medida, inédita hasta ahora en las rutas nacionales en territorio bonaerense, se promociona desde el municipio de Villarino como un incentivo para disminuir la tasa de accidentes que ocurren en esos lugares, y también para dar un paso seguro a estudiantes y vecinos que deben cruzar la calzada sin que el tránsito -normalmente- aminore la velocidad.
Dos de estos dispositivos se instalarán en la ruta nacional 3, a la altura de Mayor Buratovich y Pedro Luro, donde se da un constante tránsito de colegiales a la Escuela Técnica y el complejo de Fortín Mercedes, respectivamente; los restantes ya están ubicados en los dos ingresos a la cabecera distrital, por la ruta nacional 22.
Si bien durante enero se realizará una capacitación y se seteará cada uno de estos equipos, a partir de febrero el sistema entrará en funcionamiento, emitiendo multas a cada vehículo que supere las velocidades de 60 kilómetros por hora en esos sectores. La medición la llevan a cabo a partir de tecnología láser de última generación que analiza, en un largo rango de distancia, la velocidad de los vehículos que circulan.
Las multas, a valores actuales, oscilarían entre los 13.650 y más de 27 mil pesos, siempre de acuerdo al tipo de infracción que se esté cometiendo.
“Esta cuestión es algo que veníamos hablando con los vecinos de estas localidades, que nos manifestaban su preocupación por el peligro que representa cruzar estas rutas, más allá de los controles que llevamos a cabo con personal de Policía, Tránsito y Defensa Civil -dijo el titular del área de Protección Ciudadana de Villarino, Martín Pacheco-. Nos señalaban que constantemente hay camiones y vehículos que no disminuyen su velocidad, ni respetan la cartelería, la luz de la policía ni los semáforos intermitentes”.
Por ello, se solicitó a la Agencia Nacional del Seguridad Vial la factibilidad de instalar cinemómetros fijos -radares, similares a los que funcionan en La Carrindanga, en Bahía Blanca-, para dar una solución a la cuestión. A partir de allí, se llevó a cabo un informe, se elevó a autoridades nacionales y se consiguió implementación de estos tres puestos.
“No era un paso seguro para los chicos, menos aún de noche o durante los días nublados. Son zonas difíciles y peligrosas”, aclaró el funcionario.
Los radares tomarán velocidades a ambos lados de la traza y, en caso de detectar una velocidad mayor a la permitida, inmediatamente emitirá una multa.
“Esta es una prueba piloto, de las primeras que se hacen en el país con estos equipos, ya que hasta el año pasado no se podían poner radares fijos en las rutas nacionales. Nuestra idea es hacer un trabajo de concientización durante el primer mes y, a partir de febrero, de infracción efectiva”, señaló.
Pacheco manifestó que la gente que circule por esos lugares debe tomar conocimiento que el sistema está siendo implementado y que, a partir de ahí, respete las normas vigentes. A esto se sumará la implementación, también, de cartelería que advierta la existencia de estos controles.
“Apuntamos a bajar el número de siniestros en toda la región. En los últimos tiempos se ha visto incrementado el tránsito hacia Vaca Muerta y el sur argentino, a lo que se suma el crecimiento del puerto de Bahía Blanca. En este último año y medio, el número de camiones y vehículos de gran porte que pasan por aquí, aumentó un 30%”, sostuvo.
La instalación, a cargo de la empresa Cecaitra, finalizará en los próximos días.
La medida busca reforzar la seguridad vial, para evitar accidentes de tránsito y brindar mayor seguridad a los jóvenes que asisten a escuelas cercanas a la ruta.
En las próximas semanas, personal de Tránsito municipal realizará tareas de concientización para que los conductores conozcan de forma preventiva sus ubicaciones y adapten su velocidad a la normativa vigente.
Pasado ese período de tiempo, se infraccionará a quienes infrinjan la velocidad máxima permitida.
Los radares se ubican en la rotonda de acceso a Médanos; el cruce hacia la Escuela Técnica 1 en Mayor Buratovich y en el cruce hacia Fortín Mercedes.
DISEÑO Y DESARROLLO - Navone Juan