La candidata a gobernadora por Vamos con Todos, Silvia Horne, afirmó que la falta de inversión en los servicios de prevención de incendios que dependen del Estado provincial es parte del problema. El fuego ya consumió más de 100 hectáreas de bosque nativo y hay preocupación en toda la zona.
El fin de semana un centenar de familias de los barrios Usina, San José y Loma del Medio de El Bolsón debieron convivir con las llamas a pocos metros de sus viviendas, y hasta algunos decidieron autoevacuarse de forma preventiva. Es que el fuego en la zona de bosques de Lomas del Mirador causó gran preocupación por la posibilidad de expandirse hacia la parte urbana.
Es el primer gran incendio en la localidad luego de la tragedia de 2021 cuando las llamas arrasaron más de 6.300 hectáreas en Cuesta del Ternero.
Si bien los focos lograron ser contenidos a tiempo, la región continúa en alarma porque el suelo aún está caliente y las altas temperaturas no dan tregua.
La candidata a gobernadora por la alianza Vamos con Todos, Silvia Horne, lamentó la pérdida de grandes zonas de bosque nativo y afirmó que la falta de inversión en los servicios de prevención de incendios que dependen del Estado provincial son parte del problema.
“El abandono y la desinversión del Servicio de Prevención y Lucha contra Incendios Forestales (SPLIF) que depende del gobierno de Río Negro, sumado a la falta de preocupación de las problemáticas de la gente por estar sólo pendientes de la politiquería barata hace de esta supuesta concertación una gran mentira. Mientras tanto la gente de El Bolsón no duerme por miedo a que el fuego consuma sus casas”, expresó.
Dijo que espera que esta vez las autoridades de la provincia no eludan su responsabilidad. “Suelen culpar al gobierno nacional que no es el responsable directo de las políticas de prevención, sino que ante emergencias gravísimas, brinda apoyo”, remarcó.
Dijo que los incendios son evitables con sólo llevar a cabo trabajos de prevención. “Realizando un monitoreo constante se puede prever que ante niveles tan bajos de humedad y temperaturas altas, sumado a la acumulación de pastizales y desechos de poda en algunas zonas, se crean las condiciones óptimas para desatarse las llamas. La política de prevención debe tener continuidad verificando las condiciones de los bosques todo el año”, explicó.
Además, recordó que un grupo de estudiantes del CET 30 de Cipolletti diseñó el año pasado un mini satélite al que llamaron Messi y que tiene como misión captar y transmitir los datos de presión, humedad y temperatura de una determinada zona. El aparato podía medir rayos UV y biomasa por foto infrarroja con lo que se podrían detectar zonas muy secas, advirtiendo los sectores con mayor probabilidad de sufrir incendios.
“Son los jóvenes quienes marcan el camino del futuro. Hay que acompañarlos desde el Estado con políticas claras. Ellos piensan y diseñan lo que el gobierno rionegrino no está haciendo”, indicó.